Complicaciones del cáncer de pulmón

El líquido que se acumula en el tórax puede provocar falta de aire. Existen tratamientos para drenar el líquido del tórax y reducir el riesgo de que se vuelva a producir un derrame pleural.

Se disemina puede provocar dolor, náuseas, dolores de cabeza u otros signos y síntomas, según cuál sea el órgano afectado. Una vez que se ha diseminado más allá de los pulmones, generalmente no es curable. Existen tratamientos para disminuir los signos y síntomas para ayudarte a vivir más tiempo.